Apoyo a los estudiantes

*Publicado en la sección Perspectiva del periódico El Nuevo Día. Sábado, 5 de agosto de 2006.

Cada agosto, miles de maestros y directores vuelven a hacer un inventario de los problemas que tienen y que no pudieron resolver el año que pasó.

En medio de una revisión sobre lo que falta al comenzar el semestre, este próximo 14 de agosto las aulas vuelven a abrir sus puertas para recibir a los miles de estudiantes del sistema de educación pública de enseñanza.

El pasado 8 de julio este diario presentaba un artículo titulado "Alarma la cifra de estudiantes que fracasan" en donde exponía que la cantidad de estudiantes varones duplicaba la cantidad de féminas que no eran promovidos al próximo grado.

En síntesis, 26,753 estudiantes no pasaron al próximo grado en el año escolar 2004-2005.

El artículo menciona posibles causas para que los varones tengan mayor rezago como un desarrollo prenatal y desarrollo del lenguaje más lento o problemas específicos del aprendizaje. Sin embargo, el componente familiar, es uno de los elementos que más hay que reforzar para que nuestros estudiantes tengan mejores resultados académicos.

Según estadísticas, se estima que entre 25% y 40% de los estudiantes reflejan algún tipo de problema académico significativo. Entre los numerosos problemas sociales que contribuyen a la pobre ejecución de los estudiantes en el ambiente escolar está el poco o ningún apoyo familiar.

Es sumamente importante que los padres, las madres, los encargados y otros familiares ayuden continuamente a los niños y jóvenes para que éstos puedan seguir hacia adelante en la consecución de sus metas académicas.

Como es una realidad que muchos padres no cuentan con la educación completa necesaria para ayudar a sus hijos, es importante buscar apoyo en otras instancias como maestros, líderes voluntarios o la escuela. Tenemos que apostar por nuestros estudiantes para que sean agentes de cambio social en nuestro País. Con una educación más sólida lo podemos conseguir.